Expertos del Foro Italiano para la Seguridad Urbana, Transcrime, Centro de Estudios sobre Impunidad y Justicia (CESIJ), y del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales (COMEXI) dialogan sobre el rol de las redes criminales en el marco de la pandemia de COVID-19.

El 7 de julio de 2020, la Delegación de la Unión Europea en México organizó el decimoprimer diálogo en línea entre think tanks, "Redes criminales y COVID-19: ¿cambio de roles para mafias y cárteles." El seminario web contó con la participación de Maricarmen Hinojosa Silva, Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales (COMEXI), Gian Guido Nobili, Foro Italiano para la Seguridad Urbana (FISU), Michele Riccardi, Transcrime - Universidad Católica del Sagrado Corazón en Milán, Gerardo Rodríguez Sánchez Lara, Centro de Estudios sobre Impunidad y Justicia (CESIJ) - Universidad de las Américas Puebla. El diálogo fue moderado por Érika Ruiz Sandoval.

Los expertos intercambiaron perspectivas sobre las repercusiones de la COVID-19 en el crimen transnacional organizado y las redes criminales en la Unión Europea y México. Se subrayó que los objetivos y patrones de comportamiento de estos grupos delictivos permiten la comparación entre ambas regiones, así como el posible intercambio de buenas prácticas y lecciones aprendidas para combatir las redes criminales.

Se discutieron las consecuencias que tuvo la interrupción en las cadenas de valor globales sobre la producción de drogas y el mercado ilícito, así como la infiltración en la economía lícita ante la crisis financiera que se desató por la COVID-19. Los expertos de ambas partes subrayaron la importancia de los gobiernos para apoyar a negocios lícitos para prevenir que recurran a fuentes criminales en búsqueda de créditos, así como la necesidad de monitorear el cambio de propiedad en establecimientos afectados por la recesión económica para identificar la posible infiltración de grupos criminales.

Los expertos coincidieron en la importancia de promover la cooperación entre México y la Unión Europea en el combate al crimen organizado mediante el análisis conjunto sobre el comportamiento de estas organizaciones en Europa y América Latina, así como en las acciones de combate. Otros elementos donde México y la UE podrían cooperar son la capacitación a las fuerzas del orden federales y locales, así como la colaboración para robustecer las unidades de inteligencia financiera y la judicialización de casos. Finalmente, otras propuestas que se mencionaron durante este seminario web fueron el intercambio de buenas prácticas en políticas contra el lavado de dinero y la formación de redes de ciudades que intercambien metodologías para combatir al crimen organizado.

*El contenido de este video no refleja la postura oficial de la Unión Europea o sus Estados Miembros.