Ucrania: Declaración del Alto Representante en nombre de la UE sobre la anexión ilegal de Crimea y Sebastopol (TRADUCCIÓN NO FORMAL)

25.02.2022
Brussels

Ocho años después de la violenta e ilegal anexión de la República Autónoma de Crimea y de la ciudad de Sebastopol por parte de la Federación Rusa, la Unión Europea sigue firme en su compromiso con la soberanía y la integridad territorial de Ucrania dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas. Ahora se ha producido una nueva violación de la soberanía y la integridad territorial de Ucrania con el reciente ataque militar no provocado de Rusia contra Ucrania y su decisión de reconocer las zonas no controladas por el gobierno de los oblast de Donetsk y Luhansk de Ucrania como entidades independientes.

La Unión Europea reitera que no reconoce y sigue condenando la anexión ilegal de Crimea como una violación del derecho internacional. Sigue siendo un desafío directo a la seguridad internacional, con graves implicancias para el orden jurídico internacional que protege la integridad territorial, la unidad y la soberanía de todos los Estados.

La Unión Europea mantiene su compromiso de aplicar plenamente su política de no reconocimiento, incluso mediante medidas restrictivas y la cooperación en los foros internacionales. La Unión Europea hace un nuevo llamamiento a los Estados miembros de las Naciones Unidas para que estudien la posibilidad de adoptar medidas de no reconocimiento similares, en consonancia con la Resolución 68/262 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, del 27 de marzo de 2014. La Unión Europea no reconoce ni reconocerá la celebración de elecciones y referendos por parte de la Federación Rusa en la península de Crimea.

La creciente militarización de la península por parte de la Federación Rusa, incluidas las múltiples maniobras militares y la construcción de buques de guerra, sigue teniendo un impacto negativo en la situación de seguridad de la región del Mar Negro. En violación del derecho internacional humanitario, Rusia ha impuesto la ciudadanía y el reclutamiento en sus fuerzas armadas a los residentes de Crimea. De conformidad con la Resolución 76/70 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, de 9 de diciembre de 2021, la Unión Europea recuerda los efectos negativos de la anexión ilegal sobre la estabilidad regional, como lo demuestra el uso injustificado de la fuerza militar por parte de Rusia contra Ucrania el 25 de noviembre de 2018.

Además, la Federación Rusa debe dejar de modificar la estructura demográfica en la península, mediante el reasentamiento de su propia población civil en la península y la persecución de los tártaros de Crimea y los ucranianos étnicos.

La Unión Europea condena la construcción del puente de Kerch y la apertura de un tramo ferroviario sin el consentimiento de Ucrania. Estos pasos constituyen nuevos intentos de integrar por la fuerza la península anexionada ilegalmente a Rusia, y una nueva violación de la soberanía y la integridad territorial de Ucrania. La UE espera que Rusia garantice el paso libre y sin obstáculos de todos los buques a través del estrecho de Kerch hacia y desde el mar de Azov, de conformidad con el derecho internacional. Las actuales restricciones ilegales a dicho paso tienen consecuencias económicas negativas para los puertos de Ucrania en el Mar de Azov, así como para la región en su conjunto.

La UE no reconoce otros intentos de la Federación Rusa de integrar por la fuerza la península anexionada ilegalmente a Rusia. Esto incluye el decreto presidencial ruso sobre la propiedad de la tierra para los ciudadanos no rusos, así como la celebración de todos los censos rusos en la península.

Desde la anexión ilegal por parte de la Federación Rusa, la situación de los derechos humanos en la península de Crimea se ha deteriorado considerablemente. Teniendo en cuenta la histórica decisión del Tribunal Europeo de Derechos Humanos de 14 de enero de 2021, la Unión Europea pide que Rusia cumpla plenamente el derecho internacional humanitario, las normas internacionales de derechos humanos y las resoluciones pertinentes de la Asamblea General de las Naciones Unidas, incluida la 76/179 de 16 de diciembre de 2021. Los residentes de la península se enfrentan a restricciones sistemáticas de sus libertades fundamentales, como las libertades de expresión, religión o creencia y asociación, y el derecho de reunión pacífica. Los periodistas, los defensores de los derechos humanos y los abogados defensores se enfrentan a injerencias e intimidaciones en su trabajo. Los tártaros de Crimea, en particular, siguen siendo objeto de una persecución inaceptable, de presiones y de graves violaciones de sus derechos, especialmente mediante detenciones y encarcelamientos arbitrarios. Debe garantizarse a todas las comunidades étnicas y religiosas de la península la posibilidad de mantener y desarrollar su cultura, su lengua, su educación, su identidad y sus tradiciones de patrimonio cultural, que actualmente están amenazadas por la anexión ilegal. Deben cesar las acciones destructivas contra el patrimonio cultural de la península, como los tesoros arqueológicos, las obras de arte, los museos o los lugares históricos, que continúan sin cesar.

De acuerdo con la Resolución 76/179 de la Asamblea General de la ONU, de 16 de diciembre de 2021, es crucial que los mecanismos regionales e internacionales de supervisión de los derechos humanos, así como las organizaciones no gubernamentales de derechos humanos, tengan acceso sin trabas a Crimea y Sebastopol. Todos los casos pendientes de violaciones y abusos de los derechos humanos, como las desapariciones forzadas, la tortura y los asesinatos, la violencia, los enjuiciamientos por motivos políticos, la discriminación y el acoso deben ser investigados a fondo. La Unión Europea no reconoce la aplicación de la legislación rusa en Crimea y en la ciudad de Sebastopol y espera que todos los detenidos ilegalmente sean puestos en libertad sin demora. Condenamos las recientes detenciones masivas de tártaros de Crimea por motivos políticos. Todas las personas detenidas en la península de Crimea y condenadas en contra del derecho internacional, incluidos Nariman Dzhelyal, Emir-Usein Kuku y sus cinco coacusados, Oleh Prykhodko, Halyna Dovhopola, Enver Omerov, Riza Omerov y Ayder Dzhapparov, deben ser puestos en libertad inmediatamente. La prohibición de las actividades del Mejlis, órgano de autogobierno de los tártaros de Crimea, debe ser revocada. Rusia también debe tomar medidas para mejorar la situación medioambiental, que ha empeorado considerablemente desde la anexión ilegal.

La UE acoge con satisfacción y apoya los esfuerzos diplomáticos encaminados a restablecer la soberanía y la integridad territorial de Ucrania dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas. La Unión Europea seguirá trabajando por el fin pacífico de la anexión ilegal de la península por parte de Rusia, como se reiteró en la declaración conjunta de la primera cumbre de la Plataforma Internacional de Crimea celebrada el 23 de agosto de 2021. La UE seguirá trabajando para la aplicación de la declaración conjunta.

La Unión Europea condena con la mayor firmeza la invasión no provocada de Ucrania por las fuerzas armadas de la Federación Rusa. Condenamos asimismo la participación de Bielorrusia en esta agresión contra Ucrania y le pedimos que respete sus obligaciones internacionales.

El ataque militar de Rusia contra Ucrania -un Estado independiente y soberano- es una violación flagrante del derecho internacional y de los principios fundamentales sobre los que se asienta el orden internacional basado en normas.

La UE, junto con los socios transatlánticos y de ideas afines, se ha unido para realizar esfuerzos sin precedentes para lograr una solución diplomática a la crisis de seguridad provocada por Rusia. Rusia no ha correspondido a estos esfuerzos y, en cambio, ha optado unilateralmente por una grave y premeditada escalada.

Exigimos al Presidente Putin que cese inmediatamente las operaciones militares rusas y retire incondicionalmente todas las fuerzas y el equipo militar de todo el territorio de Ucrania. Rusia es plenamente responsable de este acto de agresión y de toda la destrucción y pérdida de vidas que causará. Tendrá que rendir cuentas de sus actos.

La UE ha dejado claro desde el principio y al más alto nivel político que cualquier nueva agresión militar contra Ucrania tendrá consecuencias masivas y graves costes, coordinados plenamente con nuestros socios transatlánticos y afines.

Además, la UE condena enérgicamente la decisión del Presidente Putin de reconocer las zonas no controladas por el gobierno de las provincias ucranianas de Donetsk y Luhansk como entidades independientes y la consiguiente decisión de enviar tropas rusas a estas zonas. Este acto ilegal socava aún más la soberanía y la independencia de Ucrania y constituye una grave violación del derecho internacional y de los acuerdos internacionales, incluidos la Carta de las Naciones Unidas, el Acta Final de Helsinki, la Carta de París y el Memorando de Budapest.

Como signataria de los acuerdos de Minsk, Rusia tiene la responsabilidad clara y directa de trabajar para encontrar una solución pacífica al conflicto en línea con estos principios. Con la decisión de reconocer la región no controlada por el gobierno del este de Ucrania como "estado independiente", Rusia está violando claramente los acuerdos de Minsk, que estipulan la plena devolución de estas zonas al control del gobierno ucraniano.

Instamos a Rusia, como parte del conflicto, a que dé marcha atrás en el reconocimiento, mantenga sus compromisos, respete el derecho internacional y vuelva a los debates en el marco del formato de Normandía y del Grupo de Contacto Trilateral.

Esta Declaración se emite en el octavo aniversario de la anexión ilegal de Crimea y Sebastopol por parte de la Federación Rusa, que Ucrania conmemora el 26 de febrero de 2022.

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