Se ha reportado que 23 civiles y un oficial de policía han muerto y cientos de personas han quedado heridas durante las protestas recientes. El uso excesivo de la fuerza en la represión de tales protestas, la escalada de la violencia y cualquier otro uso desproporcionado de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad debe parar.

La UE confía en la acción de las instituciones para investigar y llevar ante la justicia a los responsables de abusos o violaciones de los derechos humanos.

Al mismo tiempo, la UE rechaza y condena el uso de la violencia por parte de aquellos que se mezclan con los manifestantes pacíficos solo para cometer actos de vandalismo. Sus acciones ilegales asfixian la voz de la ciudadanía, reducen el espacio de la sociedad civil para expresarse, y generan caos y desorden.

Después de décadas de violencia, Colombia necesita avanzar en el camino hacia la paz. La ciudadanía de Colombia merece estabilidad y certeza, especialmente de cara a los serios desafíos que el país enfrenta causados por la pandemia del coronavirus.

La complejidad de estos desafíos requiere esfuerzos pacíficos por parte de todos los actores políticos y la sociedad civil para reducir las tensiones; para promover diálogos inclusivos; y para forjar consensos al momento de lidiar con ellos. Saludamos el llamado del Presidente Duque a un diálogo nacional.

Traducción no oficial del inglés: https://eeas.europa.eu/headquarters/headquarters-homepage_en/97888/Corrigendum%20-%20Colombia:%20Statement%20by%20High%20Representative/Vice%20President%20Borrell%20on%20violence%20during%20social%20protests